Sol sostenido, nuevo relato breve de Luis Albornoz
Tenemos el placer de compartir una nueva entrega de Luis Albornoz. En esta oportunidad el relato corto titulado Sol sostenido
Sol sostenido
Toda su vida fue tropero, pero cuando se puso viejo y ya no podía trabajar, mi abuelo le cedió un rancho para vivir en su casa de campaña. Sabía muchas historias de lobizones, aparecidos y otros misterios que sucedían en la penillanura suavemente ondulada y por eso, cuando caía el sol, los niños nos juntábamos a escuchar sus cuentos, noche adentro.
Pero una vez, mi abuelo le regaló un acordeón viejo y él dijo que era el primer regalo que había recibido en su vida. Desde entonces, lo llevaba siempre colgado en el pecho y a veces, cuando le preguntábamos algo, nos contestaba con notas. La tía Rita, que era maestra, nos dijo que había hecho una simbiosis con el acordeón, que es cuando uno se cuelga algo en el pecho y no se lo puede sacar más.
Por eso, aquella vez, cuando llegamos del pueblo, no me extrañó que lo encontráramos en el piso, frío, con el acordeón calzado. En medio del griterío, yo me acerqué y le toqué la mano. Entonces me dí cuenta, que tenía un dedo apretando fuerte, un sol sostenido.